Eres 2

Yoochun al escuchar esas palabras no pudo evitar asombrarse, es decir se encuentra con un completo desconocido después de la decepción de su vida y este va y le dice que será su ¿novio?, definitivamente había gente loca en este mundo y precisamente tenia que encontrarse con una en estos momentos. Yoochun juntó todo su valor y se levanto del suelo tomando sus ropas que ya estaban más cecas.

-donde esta el baño…

-esa puerta frente a ti…

-gracias

Camino hacia donde Yunho le indico y se encerró en el baño para vestirse rápidamente y salir los más pronto posible de la casa de ese desconocido que hacia alterar su corazón, aquel corazón que pensó se encontraba totalmente destruido por lo sucedido ayer.

-veo que eres un chico de pocas palabras…

Decía Yunho tranquilamente aun sentado en el suelo mirando hacia el baño sacando a Yoochun de su hilo de pensamientos. Cuando estuvo listo salió del cuarto de baño mirando fijamente a Yunho.

-y tu un pervertido bastante entrometido…

-pues no soy un pervertido, si un poco entrometido… -Yunho se levanto del suelo quedando frente a frente con Yoochun

-será mejor que me vaya

-hey, espera ¿Por qué no te quedas a desayunar y….

-no quiero ser descortés pero no deseo desayunar con un completo desconocido a quien no le pedí ser salvado, será mejor que me vaya y que esto quede hasta aquí

-espera…

Yunho detuvo a Yoochun sujetando una de sus manos logrando que el seño del menor se frunciera, ese leve tacto hizo que una corriente eléctrica viajara por todo su cuerpo y eso no le gusto nada.

-me gustaría volver a verte

-yo no quiero volver a verte… lo siento, pero debo irme…

Sin más Yoochun se soltó fuertemente de aquel agarre saliendo apresuradamente de ese pequeño departamento, Yunho intento detenerlo nuevamente pero no lo logro observando desde el umbral de la puerta como Yoochun corría por el pasillo del edificio perdiéndose y desapareciendo por las escaleras.

-de verdad que me gustaría volver a verte… chico suicida

Suspiro cansadamente y volvió a entrar a su departamento dejándose caer sobre la cama donde antes estuvo durmiendo Yoochun cerrando sus ojos oliendo ese aroma tan delicioso que quedo grabado en las mantas. Definitivamente Park Yoochun era un chico demasiado deseable.

…..

Por otro lado Yoochun corría a toda velocidad por el parque que esta aun lado del rio Han en busca de su automóvil y tratando de olvidar a ese chico llamado Jung Yunho. Cuando pudo encontrarlo entro en él poniéndose en marcha hacia su casa aun con la respiración acelerada.

-por qué… por qué no dejo de pensar en ese desconocido

Pero el recuerdo de la traición volvió a golpear su cerebro haciendo que su semblante cambiara nuevamente  a uno decaído.

-Junsu…

Nuevas lagrimas se agolparon en sus tristes ojos haciendo que su vista se nublara, a pesar de que aquel desconocido había logrado que se olvidara por tan sólo un momento el dolor de la traición esta venia nuevamente a golpear ese corazón que hace poco sintió nuevamente vivir, pero que nuevamente dolía debido al peso de sentirse traicionado por la persona que amaba. El sonido de su celular lo distrajo tomándolo para ver de quien se trataba.

-no… puede ser…

Trato de tranquilizar su respiración mientras se detenía a un lado de la carretera para poder contestar. El nombre de Junsu brillaba en la pantalla, Yoochun con las manos temblorosas respiro hondo para darse valor y  acerco aquel aparato a su oído para poder contestar.

-ho… la

-hasta que al fin me contestas

-lo siento… es que estaba conduciendo…

Yoochun trataba de contener las enormes ganas de llorar al escuchar a Junsu hablarle tan naturalmente como siempre, no podía creer hasta donde llegaba el descaro de la persona que  dijo amarlo una vez.

-¿Qué quieres decirme?

-veras no podremos vernos hasta dentro de unos cuatro días más o menos, me surgió un viaje de negocios de ultimo momento ya que mi jefe desea que lo acompañe hasta EE.UU para ver unos tratados

El joven músico no pudo evitar morder su labio inferior al escuchar aquellas palabras, es decir Junsu y su jefe se iban solos hacia los EE.UU obviamente no seria un viaje solamente de trabajo.

-entiendo…

-no te preocupes prometo llevarte a cenar cuando vuelva

-ya veo, pero puede que no me encuentres cuando vuelvas… -dijo casi en un susurro

-eh?...

-lo siento tengo que cortar… adiós… Junsu… adiós 

-espe…

Yoochun corto la llamada sin escuchar ninguna palabra más, dejo el celular sobre el asiento del copiloto dejándose caer sobre el manubrio del auto llorando desconsoladamente, su cuerpo temblaba ante el fuerte llanto, un llanto que nacía desde lo más profundo de su corazón al haberle dicho de aquella forma a la persona que pensaba lo amaba tanto como él, a la persona que durante este ultimo tiempo significaba lo más importante de su vida con quien pensó inocentemente estarían juntos para siempre.

-adiós Junsu… adiós amor….

Logró decir en apenas un leve susurro sin que las lagrimas se detuvieran, necesitaba hablar con alguien, necesitaba que alguien lo confortara y una sola persona llego a su cabeza, esa era la única persona que seria capaz de comprender su dolor y confortarlo con dulces palabras. Puso en marcha el auto y seco sus lágrimas para ir en busca de esa persona.

…..

La señora Park se encontraba sentada en la gran mecedora que estaba en el jardín de la casa estaba entretenida leyendo un libro. Sin embargo alguien se abalanzo sobre ella abrazándose a su regazo, se asusto ante la presencia inesperada.

-omma… omma… ¿Por qué el amor duele tanto?... ¿Por qué nadie me ama?

Yoochun lloraba dolorosamente aferrado al regazo de su progenitora quien llevo sus manos hacia los cabellos de su hijo para consolarlo, preocupada al ver a su hijo en ese estado intento que le contara que había sucedido.

-hijo… ¿Qué pasó?...

-omma… omma… Junsu…  ya no me ama…

-¿Por qué dices eso pequeño?

Yoochun levanto su rostro para ver a su madre a los ojos, la señora Park lo miraba preocupada ella estaba segura que Junsu amaba a su hijo no entendía por qué Yoochun le decía aquello.

-omma… él… él me ha estado engañando con otro… ayer cuando fui a su trabajo lo vi… lo vi con otro hombres… ambos estaban..

-no digas más hijo…

La señora Park abrazo protectoramente a su hijo quien se aferro a esos cálidos brazos que le brindaban tranquilidad, la señora Park se sentía muy mal al ver a su pequeño en ese estado no podía creer que Junsu, aquel chico quien pensó era perfecto para Yoochun pudiera engañarlo con otro, su hijo no se merecía aquello… no lo merecía…

-ven hijo será mejor que hoy te quedes aquí… vamos a que descanses un poco…

-esta bien…

Yoochun siguió a su madre sin soltar su mano sintiéndose como cuando era un niño siendo protegido por aquella mujer que se ha convertido en su ángel. Llego hasta la que hace unos años fue su habitación la cual utilizaba cada vez que venia de visita, la señora Park recostó a su hijo en la cama y se acostó a un lado de él sin dejar de abrazarlo.

-gracias… omma…

-no te preocupes hijo recuerda que para mi siempre serás mi pequeño y dulce bebé… duerme y trata de descansar…

-gracias…

Susurro antes de caer completamente dormido dejándose arrullar por las tiernas caricias que su madre dejaba sobre su cabello, tratando de olvidar y poder comenzar de nuevo.

…..

La señora Park luego de dejar a su hijo en la habitación llamo a su esposo para ponerlo al tanto.

-¿Cómo se atreve ese chico a traicionar de aquella forma a mi hijo? Ya vera que con la familia Park no se juega

-amor no digas eso sabes que si haces algo Yoochun se enojara contigo, creo que lo mejor será que nuestro hijo vuelva a vivir con nosotros por lo menos por un tiempo hasta que este mejor… y creo que deberíamos poner en marcha el plan que hace unos años atrás desechamos por respeto a Yoochun…

-creo que tienes razón mujer… es hora de hablar con mi gran amigo y poner en marcha el plan…

Tanto el señor y la señora Park formaron una sonrisa en sus rostros, está era la única forma de que su hijo saliera adelante y olvidara el dolor de la traición.

…..

Yoochun lentamente comenzó a despertar después de haber tenido un sueño reparador, miró su cuarto viendo que estaba todo tal cual él lo dejo la ultima vez que estuvo en casa de sus padres. Unos toques en la puerta hicieron que se levantara para quedar sentado en la cama.

-veo que mi niño está despierto

-omma gracias

-no te preocupes baby sabes que aquí siempre serás bienvenido, estoy seguro que el tiempo que pases en casa te servirá para olvidar al idiota de Junsu…

La señora Park se acerco sentándose frente a su hijo en la cama acariciando esas mejillas con restos de lágrimas, sonriéndole tiernamente.

-cada vez que me sonríes de esa forma indica que algo se te ha ocurrido para ayudarme, así que por favor ni se te ocurra hacer nada a mis espaldas-Yoochun enarco una ceja

-¿De qué hablas pequeño? Yo jamás he hecho nada a tus espaldas –decía haciéndose la victima

-omma te conozco muy bien y siempre quieres llevar la carga de todos mis problemas, déjame decirte que yo ya estoy bastante grandecito como para mandarme sólo

-pues te recuerdo que tu fuiste el primero que vino corriendo a mí después de que ese rufián te engañara –Yoochun suspiro cansadamente mirando a su madre aun con un dejo de tristeza

-omma no hablemos más de él por favor

-esta bien, esta bien ¿Por qué mejor no nos vamos de compras? –decía la señora Park emocionada

-no quiero- Yoochun se tapo con las mantas evitando a su mamá sabia que esas salidas de compras podían durar todo un día, y estar con su madre recorriendo todas las tiendas de Seúl era sumamente cansador

-vamos hijo así te olvidas un ratito de todo, además en unos días vendrán unos viejo amigos de papá y mamá así que debes estar reluciente para ese día

-está bien, pero primero quiero ir a buscar las cosas a mi departamento y ponerlo en venta, no quiero tener un lugar que me recuerde… a él…

Yoochun salió de su escondite mirando a su mamá tratando de formar una débil sonrisa en su rostro, ya lo había pensado y lo mejor era irse de aquel departamento donde vivió los momentos más felices y tristes con su amado Junsu, tenia que deshacerse de las cosas que le recordaran a él para poder comenzar de nuevo.

Su madre le sonrió y lo ayudo a levantarse para ponerse en marcha hacia el departamento de su hijo, llamo a unos cuantos trabajadores de la casa para que le ayudaran a empacar las cosas que su hijo deseaba llevarse.

…..

Cuando estuvo todo empacado en las cajas Yoochun miro por ultima vez el amplio departamento, fue hacia su habitación ahora vacía y camino acariciando las paredes recordando todas y cada una de las noches que se entrego a Junsu, las veces que le dijo Te amo, cuando veían películas y comían palomitas recostados en el suelo… todos los momentos más felices venían como flashes a su memoria… y no pudo evitar volver a llorar al recordar el ultimo y más doloroso recuerdo que le quedo de Junsu, el momento en que todo llego a su fin al encontrarlo con otro hombre… cayó de rodillas al suelo volviendo a llorar desconsoladamente ante la tristeza que embargaba a su corazón… su ángel, aquel chico que pensó seria la persona con quien compartiría el resto de sus días lo había traicionado de la forma más vil, engañándolo una y otra vez mientras él intentaba ignorar todas las evidentes señales… las veces que llegaba tarde diciendo que el trabajo lo mantenía ocupado, las veces que rehuía a su contacto en la calle, las veces que encontró otro olor en sus ropas... todas esas situaciones fueron indicios de que algo no andaba bien, pero Yoochun quería creer que no era así, que su Junsu aun lo seguía amando como lo hacia en un comienzo… sin embargo después de lo sucedido ayer se dio cuenta había sido un idiota todo este tiempo, un idiota enamorado que se dejo engañar con lindas palabras…

Yoochun miro por ultima vez el cuarto secando sus lagrimas prometiéndose en ese preciso momento que ya nunca más creería en el amor, que no se dejaría engañar por lindas palabras… hoy el Yoochun inocente había muerto ya no buscaría al príncipe perfecto, porque la vida a golpes y traiciones le enseñaron que el amor verdadero no existe, que las personas lo único que buscan en otras es poder complacerse a si mismos siendo capaces de destruir a otros sin importarles el daño que puedan causar…

-te prometo que no me dejare caer por tu traición… espero un día enmiendes tus errores Junsu, porque me abriste los ojos y sólo por eso soy capaz de perdonarte, aunque el dolor este aun latente se que algún día seré capaz de perdonarte de corazón y ese día podre dormir en paz… adiós Kim Junsu… adiós a tu falso amor…

Susurro aquellas palabras antes de abandonar por completo la habitación encaminándose hacia la salida donde su madre y criados lo esperaban con caras tristes, todos adoraban al joven Yoochun y su vitalidad dándose cuenta que en esos ojos fríos ya no existía inocencia, esa mirada demostraba un profundo dolor y eso causo que el corazón de la señora Park se estrujara al ver a su hijo en aquel estado.

-será mejor que nos vayamos… -la señora Park tomo una de las manos de su hijo

-quiero que quemen aquella caja y que vendan este departamento lo más pronto posible, no quiero nada que me recuerde a él por favor

Los criados asintieron y comenzaron a sacar el resto de cosas que quedaban, junto con ellas la caja que les indico Yoochun donde estaban guardado todas las cosas que Junsu le regalo, como también su celular con el numero del que una vez fue su novio.

A paso fuerte y seguro abandono el lugar junto a su madre subiendo al auto sin decir ninguna palabra preocupando a su progenitora, la cual lo único que hizo fue afianzar el agarre de sus manos tratando de trasmitirle fuerza, mientras que Yoochun sólo se dedico a ver por la ventana las calles pasar sumido en un gran silencio.

…..

Una semana había transcurrido desde que Yoochun había comenzado a vivir con sus padres, los cuales se mantenían muy preocupados ante la extraña actitud que su hijo había adoptado, ya no sonreía como antes, ya no hacia bromas a los sirvientes de la casa sino que se mantenía aislado en su cuarto donde componía música todos los días.

Yoochun no deseaba salir a ningún lado sentía que toda su vitalidad la había perdido de un momento a otro, no quería ir al trabajo por miedo a que Junsu se aparezca en su búsqueda por haber desaparecido de la noche a la mañana, por esa razón había llamado al Presidente de la empresa de entretenimiento para la cual estaba trabajando pidiéndole que lo dejara realizar la composición de la música en su casa y que él por medio de alguno de los trabajadores le haría llegar el demo. Gracias a que Yoochun siempre ha sido un gran talento y un chico trabajador el Presidente accedió a su pedido sin pedir ninguna explicación, sabia que Yoochun debía de tener sus razones.

Después de eso el joven Park ha estado trabajando en casa sin parar desde hace ya una semana, con suerte ha probado bocado… debido a que desde hace unos días que no ha podido componer nada, siente que su corazón ahora está tan vacio que le es casi imposible poder formar una frase o una melodía descentres… se encontraba nuevamente en la sala de composición intentando pensar, pero nada venia a su mente se sentía tan frustrado…

-¡maldita sea!

Golpeo una de las sillas haciéndola sonar estrepitosamente contra el duro suelo cayendo luego él de rodillas apoyando su espalda en la pared tras de si, llevo sus manos a su rostro aguantando las ganas de llorar que de pronto lo atacaron… sentía que con cada día que pasaba ahí encerrado se hundía más en un pozo sin fondo, no había nada a su alrededor que lo ayudara a devolverle la vitalidad que una vez tuvo…

Suspiro cansadamente saliendo de aquella pequeña habitación que lo estaba sofocando, fue hacia su habitación lanzándose a su cama cubriendo su cara con la almohada. Unos toques en la puerta llamaron su atención.

-pase

-hijo… -la señora Park entro lentamente encontrándose con su hijo recostado en la cama

-¿Qué sucede omma?

-hijo necesito que te arregles en un par de horas llegaran nuestros amigos y quiero que hoy vistas tu mejor tenida-Yoochun miró a su mamá un poco enojado

-omma de verdad que no quiero asistir a ninguna cena, no me siento bien y no tengo ánimos de nada –se  volvió a recostar en la cama

-hijo por favor, son nuestros amigos y ellos quieren conocerte… hazlo por tus padres, además te hará bien salir un rato de esta habitación…  si?

Yoochun levanto un poco su rostro mirando a su madre, aunque no quería asistir a la cena que seria ahí mismo en su casa sentía que debía hacerlo, ya que sus padres se han portado tan bien con él que se los debe.

-esta bien… -suspiro cansado

-enserio?? Ahhh hijo no sabes lo feliz que me hace… bien ahora ve a bañarte después vendré a ayudarte a ver que te pondrás para la cena… ahh estoy tan emocionada..  gracias… -la señora Park le sonrisa su hijo y le dio un sonoro beso en la mejilla viendo en los labios de Yoochun una leve sonrisa

-de nada…

-bien ve a bañarte ya vendré yo en un rato más y no te quiero encontrar de holgazán…

Yoochun con una leve sonrisa vio salir a su madre del cuarto, pero cuando la puerto se vio cerrada esa sonrisa rápidamente se desvaneció dando paso nuevamente a la tristeza. Pesadamente se levanto de su cama encaminándose hacia el baño para darse una ducha reparadora y arreglarse para la famosa cena que tenia tan entusiasmada a su madre.

…..

Junsu se encontraba afligido no encontraba a Yoochun por ninguna parte. Cuando hace cerca de tres días que llego a Corea se encontró con la increíble sorpresa de que Yoochun ya no vivía en su departamento, es más gracias al conserje se entero que hace unos días había venido junto a un grupo de personas a buscar sus pertenencias dejando estipulado la venta del departamento. Junsu intento preguntarle si sabia hacia donde se había ido, sin embargo el anciano hombre no pudo ayudarle diciéndole que  el joven Yoochun no dijo nada sobre su nuevo paradero.

Y hoy nuevamente se encontraba en el trabajo de Yoochun tratando de encontrar algún tipo de información útil. Una de las trabajadoras le ayudo a saber donde estaba el joven Park, gracias a los encantos de Junsu todo se le hizo más fácil.

-bueno según una de mis compañeras el joven Park se encuentra en la casa de sus padres…

-¿Y no sabes cuando se presentara a trabajar?

-lo siento, pero según lo que me contaron el joven Park le pidió al presidente poder trabajar en su casa y que por medio de uno de los trabajadores haría llegar los demo… eso es todo lo que me han podido decir

Junsu frunció el seño sabia que algo raro estaba pasando, no podía ser que su novio desapareciera de la noche a la mañana sin siquiera dejarle una nota o una mísera llamada sobre su paradero. Decidió ir hacia la casa de los Park en busca de la verdad, pero cuando estuvo fuera de la empresa una conocida figura detuvo sus pasos….

Continuara….

Nota: Bueno espero les halla gustado espero le den mucho amor a este nuevo proyecto que aun le falta mostrar los capos más emocionantes, y si quieren saber cuando aparecera nuestro caballero de Yunho al rescate no se despeguen de nuestro canal xD... cuidense mucho y nos seguimos leyendo ^^