Capítulo 4: Bola de nieve

Bola de nieve

“Orgullo”

“La principal regla que todo Casanova

Debe respetar… es jamás enamorarte de la presa

Porque si lo haces… pierdes”

Dos días habían transcurrido ya desde la hospitalización del pequeño Taemin en aquella clínica gracias a la ayuda de Changmin y hoy los médicos al fin fueron capaces de encontrar la cura a la enfermedad del pequeño.

-¡gracias señor muchas gracias!...

Decía la señora Lee quien con lágrimas en sus ojos se aferraba a los brazos de Junsu ante la felicidad de saber que su querido y amado hijo al fin se curaría de esa terrible enfermedad, y en menos tiempo del que imaginaba lo vería correr y reír nuevamente por toda la casa.

-¡todo es gracias a usted joven Changmin, de verdad que se lo agradezco!

-no se preocupe señora Lee mi padre fue quien a costeado todos los gastos es a él a quien debe darle as gracias…

Una tierna sonrisa se formo en el rostro de Junsu al escuchar esas palabras venir del siempre frio Jung Changmin.

-gracias…

Su-ah miraba enternecida a Changmin acercándose hasta él para darle un abrazo repitiéndole una y otra vez lo agradecida que estaba por haber ayudado a su pequeño Taemin, logrando que nuevamente un leve carmín apareciera en las mejillas del joven Jung.

-de… nada…

Respondió tímidamente viendo a Su-ah alejarse junto a la señora Lee hacia la habitación de Taemin para ver si ya había despertado. Miro a su alrededor recargándose en la fría pared de aquel pasillo con los ojos cerrados sintiendo que ya era hora de tomar una decisión con respecto a su vida, definitivamente aquello que una vez creyó como un sueño que jamás podría cumplir hoy lo sentía palpable.

Tranquilamente sacó su teléfono del bolsillo de su pantalón para hacer una llamada a esa persona ha quien debía decirle sobre su nueva decisión.

-dime hijo

-papá necesitamos hablar

…..

Yoochun se encontraba caminando por los pasillo de la universidad mirando todo a su alrededor, todas las mujeres que se encontraba a su paso hacían lo posible para llamar su atención mirándolo con gran deseo buscando la forma de poder enredarse en la sabanas del gran Jung Yoochun, el Casanova de la universidad, el hombre perfecto, el chico que hacia vibrar sus cuerpos despertando sus más bajos instintos.

Era bien sabido en el lugar que Yoochun no sólo se acostaba con toda mujer que le pareciera atrayente sino que también sabia como complacerlas y hacerlas rogar por más… por eso es que todas querían ser capaces de probar el néctar excitante que sólo Yoochun era capaz de entregarle a su deseosos cuerpos.

Sin embargo últimamente los gustos de Yoochun habían tomado un giro inesperado, ya no buscaba a las chicas más populares de la universidad o las más hermosas sino que ahora iba tras las chicas de carácter inocente con esa aura virgen, ellas eran sus nuevas victimas, y digámoslo, Yoochun lo estaba disfrutando, ser el primero en probar la flor de una chica era increíblemente excitante y más cuando ellas pedían una y otra vez por más… esto alimentaba de sobremanera su ego.

Pero jamás pensó que aquel jueguito que le parecía fascinante podría salirse de sus manos, ser el primero en la vida de una mujer, especialmente aquellas que son inocentes significa más de lo que un hombre como Yoochun puede imaginar.

-¡hasta que te encuentro Jung Yoochun!

Una joven de cabellos largos, de ojos grandes y un cuerpo delgado vestida con ropas normales venia corriendo a su encuentro.

-¿Qué quieres?

Respondió fríamente cuando la chica estuvo a unos cuantos pasos de distancia mirándola de arriba abajo tratando de recordar en donde la había visto.

-necesito hablar contigo sobre algo importante

-¿Qué yo sepa nunca nos hemos visto antes?

La chica quedo estática ante las palabras tan crueles de aquel hombre frente a sus ojos, aquel hombre que a ojos de todos parecía perfecto, pero que en verdad era el ser más cruel del mundo.

-yo… yo…

-si tienes algo que decirme dímelo de inmediato mira que estoy ocupado

-¿Por qué eres así conmigo siendo que hace apenas un par de días te di mi primera vez?

Aquella chica estaba al borde de las lágrimas tratando de ser fuerte ante él, sin embargo Yoochun volvió a mirarla con total indiferencia tratando de recordarla, hasta que una imagen llego a su mente… ¡ahora lo recordaba!... aquella era la chica que hace unos días se había tirado en la fiesta de uno de sus amigos, sabía que la había visto antes.

-mira pequeña lo que sucedió en aquella fiesta se quedó en ella, así que por favor no vuelvas a molestarme nunca más

Con ese semblante serio caminó tranquilamente hacia la salida de la universidad pasando a un lado de la chica sin mirarla siquiera.

-¡Te vas arrepentir por haberme humillado de está forma Jung Yoochun!¡Te arrepentirás!

-¡como tu digas!

Sin siquiera mirar hacia tras alzo su mano en forma de despedida dejando atrás a una triste y humillada mujer, una de las tantas que creyó en sus promesas… así era Jung Yoochun un hombre frio quien sólo buscaba de las mujeres un momento para liberar su deseo, nunca buscaba el amor en ellas… es más para él el amor era lo más absurdo del mundo, él jamás se enamoraría de alguien, jamás…

…..

Otra semana ha transcurrido desde que los hermanos Jung llegaran a vivir a la casa 

de Jejuko al igual que Junsu, otra semana tratando de acostumbrarse a las reglas.

Aquel día Yunho se encontraba solo en la gran casa, como se había escapado de las clases de la universidad llegó más temprano de lo normal a casa, ya que hoy debía juntarse con los Dragones Negros para arreglar ciertos, como decirlos, problemitas con una banda que estaba tratando de abarcar más territorio del permitido y Jung Yunho junto a los Dragones Negros les pertenecía la zona más importante de Seúl y no pensaban soltarla por ningún motivo.

Antes de salir decidió tomar una ducha relajante antes de la inminente golpiza que les daría a esas ratas. Estuvo en la ducha por casi media hora y cuando creía que ya había sido suficiente cerró la llave y enrollo la pequeña toalla en su cintura tomando otra para secar sus cabellos. Tranquilamente salió del baño para poder ir a vestirse.

…..

Junsu aquel día había llegado temprano como hace unos días había sido capaz de entrar a la universidad a estudiar lo que siempre soñó ahora tenia bastante tiempo libre por las tardes.

Cuando entro en la casa al no escuchar mucho ruido pensó que se encontraba solo, así que vestido con ese vestido que se adhería bastante bien a su cuerpo y que le llegaba a las rodillas subió las escaleras para ir hacia su cuarto. Sin embargo una figura saliendo del baño lo hizo respingar asustado.

-¡¡ahhhh!!!

Grito fuertemente retrocediendo unos cuantos pasos al ver a Yunho salir del baño con apenas una toalla cubriendo la parte baja de su cuerpo, lo miró de arriba hacia abajo cayendo en la cuenta de cierta parte de la anatomía del mayor, una parte que resaltaba más de lo que había imaginando. Trago duro al sentir el calor llegar a sus mejillas por presenciar el cuerpo tan bien formado del joven Jung, piel morena, músculos bien definidos que definitivamente sólo se logran con  ejercicio diario sintiendo una increíble envidia por aquellas gotas de agua que resbalan por su piel libremente, si tan sólo él fuera…

-veo que te gusta lo que ves

Y esas palabras lo hicieron salir completamente de ese trance que la visión del cuerpo del mayor lo tenia sumido, rápidamente levanto su mirada topándose con un divertido Yunho que la miraba con una sonrisa en sus labios.

-de… de qué estás hablando… yo… yo será mejor que me vaya…

Decidido caminó a un lado de Yunho para seguir hacia su habitación, pero unos fuertes brazos lo detuvieron de toda acción sintiendo su cuerpo ser casi azotado contra una de las paredes del pasillo.

-no seas tan tímida Su-ah si quieres puedes tocarme, por ser tú no te lo impediría

Junsu trago hondo sintiendo a su corazón acelerar al sentir el cuerpo de Yunho apretar el suyo más contra la pared, una gota de sudor bajó por su rostro tal cercanía no era para nada buena, si seguían así Yunho podría darse cuenta de cierto problemita que estaba creciendo bajo su falda y no podía darse el lujo de ser descubierto.

-suéltame por favor…

Intentó zafarse del fuerte agarre de los brazos de Yunho, pero  por más que lo intentara se podía notar las diferencias de fuerzas.

-por favor…

-¿Por qué quieres que te suelte? si se que te gusta lo que vez, no sabes lo bien que ambos podríamos pasarla ¿o no?

Una mano de Junsu fue liberada creyendo que el alto moreno lo dejaría en paz, pero sintió una mano traviesa comenzar a subir por su muslo levantando el vestido, rápidamente el miedo se dibujo en el rostro de Junsu y decidido comenzó a forcejear con más fuerzas, no podía dejar que lo descubrieran, no podía. Sin embargo esas manos insistentes no lo dejaban en paz ganando más terreno en sus piernas tocando su piel fría.

-¡¡suéltame Yunho!!

-vamos cálmate… yo…

Un fuerte ruido se pudo escuchar hacer eco por toda la casa, Junsu había logrado zafarse de su fuerte agarre  y con el miedo aun corriendo por sus venas sin haberlo pensado azoto su mano contra el rostro de Yunho dándole una sonora y dolorosa 

cachetada.

Yunho retrocedió un paso debido al fuerte golpe quedando inmóvil ante la actitud inesperada de la joven, la cual respiraba laboriosamente cubriendo su boca con una de sus manos al caer en cuanta de lo que había hecho.

-yo… yo… no pienso pedir disculpas

Junsu salió corriendo hacia su habitación cerrando fuertemente la puerta tras de si, su corazón latía demasiado apresurado y apoyado en la fría madera se dejo caer llevando sus manos a su rostro dejando liberar esas lágrimas contenidas… lágrimas repletas de miedo del sólo pensar sobre lo que acababa de pasar y de esos latidos que golpeaban fuertemente su pecho… esos latidos que no podían ser, esos latidos que te llevan a un sentimiento sin retorno.

Mientras que Yunho se quedo ahí parado en el pasillo con los ojos abiertos, nunca antes una mujer se había negado a él y mucho menos se había atrevido a levantar una mano contra su rostro.

Mordió su labio inferior tratando de retener la ira que estaba creciendo en su cuerpo y dando media vuelta se encerró en su habitación colocándose ropa con suma velocidad, saliendo de la casa a los cinco minutos.

Se subió a su motocicleta rumbo hacia el escondite de los Dragones Negros yendo a una velocidad que superaba a la permitida, recordando una y otra vez el rostro asustado de aquella chica, nunca antes una mujer le había hecho perder la cabeza como ella era capaz de hacer.

-¡mierda!

Grito con el casco puesto aumentando más la velocidad pensando que el fuerte viento que azotaba su cuerpo le permitiría olvidar ese cuerpo, esos labios… esos ojos…

…..

Yoochun estaba arto, inexplicablemente hace unos días alguien estaba interfiriendo en sus planes de conquista, todas las chicas a quienes ponía sus ojos e intentaba de alguna forma llevarlas a su cama al día siguiente o a las horas después les pasaba algún tipo de accidente.

La última chica por lo que pudo escuchar de parte de sus amigos había caído por las escaleras fracturándose una de sus piernas. Nadie sabía lo que estaba sucediendo ni las victimas recordaban haber tenido algún enemigo o haber visto algo extraño el día de su accidente. Ya iban cerca de cinco chicas accidentadas de forma inexplicable y eso no le estaba gustando para nada a Yoochun, todas eran chicas con las que había intentado ligar y lo único que vino a su cabeza fueron las palabras de aquella chica… ¡Te vas arrepentir por haberme humillado de está forma Jung Yoochun!¡Te arrepentirás!...

-imposible

Mordió su labio inferior yendo directamente hacia su casa para prepararse para el cumpleaños Hwang Bo, nadie le estropearía la oportunidad de tirarse a las chicas más guapas de la universidad está noche, nadie.

Sin embargo una idea cruzo por su cabeza, si quería estar libre del acoso aunque sea por un momento necesitaba una carnada y ya sabia a quien utilizar.

-definitivamente tu me podrás ayudar

Con una enorme sonrisa en su rostro se fue rumbo hacia su casa sin darse cuenta de la delgada figura que vigilaba tras uno de los muros cada uno de sus pasos, una figura cargada de humillación.

…..

-por favor tú eres la única persona que puede hacerme este favor

-me niego

Yoochun había llegado a la casa encontrándose a su hermano menor y a su hermana junto a Su-ah cenando tranquilamente. Rápidamente se acerco a la mesa y le pidió a Su-ah que lo acompañara a la fiesta de esa noche, necesitaba de la ayuda de la chica para poder distraer al acosador y poder tener un momento libre para ligar tranquilo, aunque esto ultimo no se lo dijo, sino que solamente se limito a pedirle que lo acompañara a la fiesta en la casa de una amiga.

-¿Por qué quieres que Su-ah te acompañe teniendo a todo un harem tras tuyo esperando la más mínima de tus ordenes para lanzarse a tu cama?

Changmin comía bastante enojado no le gustaba nada que ha su hermano se le ocurriera invitar a Su-ah a esa fiesta de perdición, la chica a su parecer era demasiado inocente como para andar metida en ese tipo de lugares viendo desfilar a todas las chicas que una vez pasaron por la cama del gran Jung Yoochun.

-vamos Su-ah veras que te divertirás, por favor acompáñame

-mmm… Yoochun no creo que sea buena idea que mi amiga te acompañe si quieres puedo ir yo en su lugar

-no, tienes que ser ella prometo que no te dejare sola en la fiesta, además esto te ayudara a conocer a otros chicos

Yoochun miraba a Junsu con ojitos de cacharrito buscando una aprobación, pero Junsu no se encontraba para nada seguro algo no andaba bien, tanta amabilidad de un  momento a otro siendo que antes con suerte y se saludaban no podía traer nada bueno consigo. Miro a Jejuko no muy convencida, pero está con un gesto le indico que fuera, además si lo pensaba mejor está era una buena oportunidad para conocer al Casanova Jung y acercarse un poco más a él.

Aun no muy convencido volvió su mirada hacia Yoochun el cual estaba expectante ante su respuesta.

-está bien… -un suspiro cansado salió de sus labios

-¡Si!¡Gracias Su-ah veras que no te arrepentirás!

El mayor saltaba feliz ahora si su plan iba viento en popa, sin embargo Changmin casi se había atorado con su comida al escuchar el si por parte de Su-ah rápidamente dirigió su mirada hacia la tímida chica que sonría no muy convencida, pero ya no había vuelta atrás lo único que esperaba era que el idiota de su hermano supera cuidarla.

…..

Ya era cerca de media noche y la fiesta se encontraba en lo más alto, todos bailaban y disfrutaban en el gran jardín de la casa donde se había dispuesto la fiesta. Chicos y chicas por doquier bebiendo, besándose, rosando sus cuerpos al bailar, todo un suceso que la juventud sabia como disfrutar hasta que uno de los invitados más esperados ingreso de la mano de una joven chica que nunca nadie había visto antes.

Cabellos largos negros como la noche, sonrisa nerviosa, labios rosados cubiertos con apenas un poco de brillo, ojos ligeramente pintados de color negro, un vestido en tonos azules que le llegaba hasta un poco más arriba de las rodillas, unas pantis de color negro y una chaqueta del mismo color le daban un aire misterioso y para que decir esa figura resaltando su marcado trasero formando una perfecta S line dejando a todos los hombres presentes atónitos ante la belleza de la chica desconocida que caminaba tímidamente de la mano del hombre más envidiado en esos momentos, Jung Yoochun.

-vaya que preciosidad traes contigo hoy Yoochun

Uno de los amigos de Yoochun se acerco a él para poder saludar a la chica tan guapa, la cual enrojeció ante esa mirada cargada de deseo.

-hey no la mires así mira que la pones nerviosa… ¿Dónde está Hwang Bo? Necesito dar una noticia a todos los presentes

-mmm parece que se encuentra en la casa, tu sabes esa chica no se resiste a los hombres guapo y como hoy llego presa nueva debe estar pasándosela de lo lindo en una de las habitaciones

Ambos jóvenes rieron fuertemente haciendo que el seño de Junsu se frunciera ante las frías palabras, jamás le gusto que hablaran así de las mujeres  y por lo que podía ver Jung Yoochun no era para nada la figura de hombre caballeroso.

-bueno, bueno ¿Por qué no le dices a uno de tus chicos que la…

-¡JUNG YOOCHUN!

Y ese fuerte grito hizo que varios se giraran para saber de donde provenía, una chica de piel morena corría hacia Yoochun saltando sobre sus brazos dándole un beso sin importarle la mirada de todos los presentes y la de asombro de la joven Su-ah, la cual sentía que ese no era para nada su lugar.

-cálmate querida mira que soy un hombre comprometido

-eh? ¿De qué locuras hablas Jung Yoochun?

Hwang Bo miraba con la duda marcada en su rostro a Yoochun, el cual se rio ante los rostros de las personas a su alrededor que a pesar de que la música estaba en un volumen fuerte se mantenían atentos a sus palabras.

Yoochun se alejo de la chica tomando a Junsu de la mano guiándola hasta el pequeño escenario que había al centro del jardín, le quito el micrófono al chico que en esos momentos animaba la fiesta y con una sonrisa en su rostro lo dirigió a su boca apretando la mano de Junsu, quien no sabia donde esconderse ante las penetrantes miradas de todas las personas.

-hoy quiero darles una noticia importante… -miro de reojo a Junsu y siguió hablando –hoy quiero decirles que yo Jung Yoochun he decidido sentar cabeza y he venido a la fiesta de nuestra querida Hwang Bo a presentarles a mi… ¡Novia Su-ah!

-EH??!!!!!!!

Dijeron todos los presentes a la vez al igual que Junsu, si esto era una broma no le estaba gustando nadita, sin embargo el siguiente movimiento no lo vio venir los fuertes brazos de Yoochun lo habían atraído hacia su cuerpo tomando sus labios en un profundo beso que lo hizo abrir los ojos a más no poder.

Mientras que una mirada escondida entre el tumulto de gente que gritaba asombrada aun sin terminar de creerse las palabras de Yoochun, apretaba sus puños tratando de aguantar la ira que crecía en su corazón.

Continuara….

Nota: Hola mis queridas lectoras, lo se no hay perdon de Dios pero más vale tarde que nunca xD... espero les haya gustado el siguiente capítulo estara muy emocionante asi que no se despeguen de nuestro canal jajajjajaja xD... cuidense byee^^... 

PD: no olviden dejar sus bellos comentarios ^^